El podólogo y las plantillas

A continuación, vamos a explicar todo cuanto hay que saber sobre el podólogo y las plantillas. Y es que, cuando aparece un problema en el pie, en especial mientras el individuo está en pleno desarrollo, que es cuando más fácil resultará corregir cualquier desviación que se produzca del desarrollo natural del pie.

Qué es una plantilla ortopédica

Comencemos por el principio, como es lógico. ¿Qué es una plantilla ortopédica? Hablamos de un elemento que se utiliza para corregir un problema en el pie, en la pisada, en el caminar, etc.

En cualquier caso, previamente se realizará un estudio de la pisada en el que se analicen los gestos, la biomecánica del cuerpo y todo lo necesario para hacer la valoración previa y saber si será necesario el uso de estas plantillas o no para revisar y corregir errores.

Este elemento también es conocido como ortesis plantar, y debe realizarse de forma personalizada. El dispositivo médico se añadirá al interior del calzado para corregir las posibles desviaciones previo análisis mecánico mencionado que nos dará los parámetros para la realización y aplicación de la plantilla.

Con una plantilla, además, se busca cómo modificar las magnitudes en lo que se refiere a las diversas fuerzas que afectan al pie. Todo ello se analiza en el estudio de la mecánica de las articulaciones, por ejemplo.

Sea como fuere, una plantilla hará efecto al llevarse puesta, como es lógico. Y es que el objetivo último será compensar aquellas anormalidades biomecánicas observadas que puedan lograr prevenir y tratar o modificar los problemas de movimiento que hayan sido observados en análisis y estudios previos.

El mejor momento para llevar a cabo un estudio biomecánico del pie

¿Cómo sabemos si el pie necesitará el uso de una plantilla para adaptarse correctamente? Con el estudio biomecánico que se debe realizar dependiendo de ciertos parámetros:

  • El estudio de la pisada debería tener una periodicidad anual. De esta forma se sabe si se ha podido producir algún cambio por culpa de una lesión, del apoyo del pie, de las costumbres del paciente, etc.
  • Tras una lesión en el miembro inferior, desde la cadera hasta el tobillo pasando por la rodilla, toca realizar el estudio para saber si harán falta medidas correctivas.
  • El estudio biomecánico también se hace necesario cuando se ha producido un tratamiento orto podológico. Se hace para observar la efectividad de todo el proceso. así se descubre la evolución de la pisada y se comprueba si se han corregido los errores que se pretendían arreglar.
  • Por último, toda persona que se inicia en un deporte, en especial si es de forma profesional, debería pasar por un estudio biomecánico de su pisada. De esta forma se puede preparar un plan de prevención en el momento de adquirir el material deportivo adecuado para sus características. También se adelanta uno a las posibles lesiones y se mejora y optimiza la capacidad de práctica del paciente.

Los beneficios de las plantillas

Llegados a este punto, consideramos importante que conozcas uno a uno cuáles son los principales beneficios en el uso de las plantillas ortopodológicas. Toma buena nota de ellos:

  1. Reducen las presiones en zonas sintomáticas. Es decir, hacen que disminuya la fuerza patológica en esta extremidad inferior. Así es como, poco a poco, el pie vuelve a su estado natural, reestableciendo la estabilidad y el equilibrio de todo el cuerpo cuando se han puesto correctamente.
  2. Realizan las correcciones necesarias. O sea, corrigen diversos estados alterados en la extremidad, como la supinación y la pronación, el control de la velocidad de ambas, supinación y pronación, la rotación interna de la tibia o de la rodilla, el pico de impacto del pie, al ángulo de flexión dorsal en el tobillo, la activación del tibial anterior, la activación del bíceps femoral en carrera, etc.
  3. Son efectivas para el tratamiento de diversos trastornos del pie. Se han demostrado eficientes para tratar la fascitis plantar, para las lesiones anatómicas como las tendinitis, para el síndrome de rodillas del corredor, para reducir el valgo y el varo de rodilla, para rebajar la presión del pie diabético o neuroático, para prevenir fracturas por estrés en fémur y metatarso, etc.

En cualquier caso, debes tener siempre el consejo y la supervisión del podólogo para saber que usas la plantilla correcta, la que no provocará daños, y la que ayudará a tratar cualquier problema que tengas. Y así es como se establece la relación actual entre el podólogo y las plantillas. Puedes saber más sobre el tema entrando en contacto con nuestros expertos para que te guíen y te ayuden en este asunto.

Sea como fuere, ahora que sabes cuándo acudir a la clínica podológica, recuerda que nos puedes contactar para resolver cualquier duda que te asalte. Nuestro equipo experto encontrará la mejor solución a tu caso concreto.

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